Pocas cosas habrá que me gusten tanto como la pizza, es algo superior a mi voluntad, como salga a comer fuera y haya pizza, no me puedo resistir . . .desde luego la mejor que he probado fué en Nápoles, a mí me encantó, pero claro también os digo una cosa , para que a mí no me guste una pizza . . . otra cosa que me pareció espectacular fueron lo gnocchi . . . estaban buenísimos.
Ingredientes:
Para la masa:
750 gr. de harina de fuerza
37 gr. de levadura fresca
1/2 cucharadita de hierbas provenzales
1/2 cucharadita de ajo en polvo
2 cucharaditas de azúcar
2 cucharadas de aceite de oliva
sal
agua templada
harina con sémola de trigo para extender la masa
Para el cubrir la base:
Salsa de tomate
Salsa barbacoa
orégano
albahaca
queso mozarella
champiñón laminado
jamón de york
pollo (ya cocinado: asado, a la plancha . . .)
pimiento verde
maíz
rodajas de tomate
Empezamos haciendo la masa de la pizza mezclando todos los ingredientes secos, y poco a poco añadiendo agua templada, hasta que la masa no se pegue a las manos.
Amasamos bien y dejamos leudar la levadura en un lugar cálido y oscuro. Yo lo que hago es calentar un paño de cocina (con el grill del microondas con mucho cuidado), tapo el bol de la masa con el trapo caliente y lo pongo en el microondas (apagado), hasta que duplique su volúmen, una hora aprox.
Para estirar la masa yo pongo harina de freir, pero de una marca en concreto (las panaeras sevillanas) que lleva bastante sémola de trigo, y que en Madrid me es muy difícil encontrar, pero podéis mezclar sémola de trigo con harina. Con esto consigo que quede crujiente la masa y además que no se peque al estirarla con el rodillo.
Con esta cantidad de masa salen dos bases de pizza del tamaño de una bandeja de horno (como la foto de abajo)
Cuando tengamos la masa estirada en papel de horno, pondremos los ingredientes, empezando por la salsa de tomate ( 3 partes de salsa de tomate por una de salsa barbacoa), encima de la salsa el orégano y la albahaca (la cantidad a vuestro gusto).
A continuación extendemos el queso mozarrella y los demás ingredientes repartidos por toda la pizza.
Horneamos a 200º hasta que la masa esté dorada, pero no demasiado dorada, porque al llevar la harina con sémola estará muy crujiente.
Espero que os guste.
Que grande que sale!! Me la quedo. En mi casa siempre les parece pequeña la del molde, jj
ResponderEliminarUn abrazo y a disfrutarla chica!!
desde luego que lo hecho en casa no tiene ni punto de comparacion a lo industrial.
ResponderEliminarBesitos!
Ladykath
http://mis-dulces-pecados.blogspot.com/
ES QUE COMO LAS PIZZAS CASERAS NADA,UN BESOTE ENORME
ResponderEliminarDesde luego, donde esté una pizza casera...
ResponderEliminarQué pintaza esta pizza, Mari. A mí también me fascina...
ResponderEliminarBesotes!