Es la primera vez que lo hago, pero desde luego no será la última porque ha sido todo un éxito, estaba riquísimo.
Es básicamente una tarta de plátano y dulce de leche. Algo que he podido comprobar es que si lo dejas en la nevera toda la noche mejora bastante, será porque el plátano se macera con el dulce de leche, pero el cambio me resultó bastante notable.
250 gr. de galletas
100 gr. de mantequilla sin sal
300 ml de nata montada
100 gr. de azúcar glass
4 - 5 plátanos
200 gr. aprox. de dulce de leche
En primer lugar machacamos las galletas y las mezclamos con la mantequilla.
Forramos con un molde desmoldable con esta mezcla de las galletas.
A continuación vamos colocando rodajas de plátano sobre la base de las galletas hasta cubrirlas totalmente.
Ponemos una capa de dulce de leche por encima de los plátanos.
Añadimos otra capa de nata montada con el azúcar glass previamente incorporada a la nata.
Dejamos enfriar y reposar toda la noche (si os podéis resistir. . .), desmoldamos y decoramos con chocolate rallado, o como es mi caso, con unas rodajas de plátano y granillo de almendra.
Espero os guste.
Este pastel se ve bien para comer como, ja, ja, sobre babeo. Tengo la intención de disponer de un método de acuerdo con el texto, tal como a ti mismo para hacer una tarta.
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